Todo el
tiempo perteneciendo a todo
y al mismo
tiempo a nada,
perteneciendome
a mi misma
que no soy
nada y a la vez soy todo.
Viviendo
siempre en otro tiempo
y sin
pertenecer a ninguno,
perdida como
un verdadero hallazgo,
retraída y
en continua contradicción con la vida.
Qué vida más
pesada te ha tocado llevar,
qué alma tan
lacerada te ha tocado reinventar,
qué cabeza
tan loca te ha tocado aliviar,
qué vacío
tan hondo hoy te toca llenar.
Lo que más
se elude,
a veces es
lo que más se ama
y lo que más
se necesita
no siempre
es lo que más se extraña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario